De dulces por Portugal

Hola queridos seguidores, unos días de abuela intensos, me han hecho demorarme de lo que os estaba contando, respecto a mis andanzas culinarias en mis vacaciones de verano. Pero hoy de nuevo sigo en ello.

Os voy a transmitir mis impresiones y sabores con algo tan exquisito como es la repostería portuguesa. No puede ser esta entrada un tratado de todas sus especialidades, sería interminable, pero sí de aquellas que he tenido la oportunidad de probar¡Que ricura! Y de alguna que luego en casa he intentado reproducir.

Fuente:Imagen de CHL correspondiente a la Ria Aveiro, Aveiro y Ovos Moles

Si nos adentramos a través de la Ría de Aveiro, llegamos a la ciudad de su mismo nombre, en el norte de Portugal. Sus pastelerías riquísimas y aquí un dulce emblemático que aunque lo puedes encontrar en otras ciudades portuguesas, esta es su cuna. Se trata de los LOS OVOS MOLES DE AVEIRO.

Son bocados de cielo creados por las monjas del Convento de Jesús,actual Museo de la ciudad, fundado en 1458, en este vivió hasta su muerte la princesa Santa Joana, hija del Rey de Portugal Afonso V, que posteriormente fue beatificada por el Papa Inocencio XII en el año 1693, debido a las curaciones y milagros que se le atribuyeron.

El Convento de Jesús se mantenía gracias al pago de los arrendatarios por el uso de las tierras propiedad de las monjas, este pago se efectuaba en especies, es decir en forma de viandas que en su mayoría se ceñían a trigo, gallinas y huevos. Las monjas que cultivaban la abstinencia no comían los huevos y para su conservación empezaron a unirlos al azúcar, dando como resultado el origen de este delicado dulce. Estas lo utilizaban para el alimento de los enfermos que cuidaban.

Son parecidos pero más blandos que las yemas de Santa Teresa de Ávila o las yemas de Ronda en Málaga. Pero este dulce tiene la particularidad de que son envueltos en unas obleas finas como el pan de consagrar, con formas marineras. También se pueden encontrar en barricas de madera o de cerámica, decoradas con imágenes típicas de Aveiro.

El único inconveniente de estos dulces es lo perecederos que son, a partir de las 48 horas empiezan a resecarse y su caducidad,nos dijeron, es de seis días.Así que lo mejor es comerlos en las propias confiterías de Aveiro.

Me parece que es un dulce complicado de elaborar pero aquí está la receta para los valientes:
Ingredientes

• 250 gramos de azúcar
• 150 mL agua
• 15 yemas de huevo bien separadas de las claras
• Obleas

Preparación

Disolver el azúcar en un cazo con el agua. Cocer a fuego lento sin dejar de remover hasta que el almíbar empiece a espesar y alcance el punto de hebra.

Retirar la cazuela del fuego, dejar enfriar un poco el almíbar y juntarlo con las 15 yemas de huevo, removiendo constantemente. Poner de nuevo a fuego lento, evitando en todo momento que llegue a hervir, y trabajar con una espátula hasta que la mezcla deje de pegarse a las paredes del cazo. Por último, extender en una fuente y dejar enfriar.

Rellenar las obleas.

Sin duda los más identificativos de Lisboa son los Pasteis de Belem, con una receta antiquísima y celosamente guardada , que se adornan espolvoreados con azúcar glas y canela y en su interior una rica crema protegida por una no menos rica cazoleta. La crema elaborada a base de nata, azúcar y yema de huevo constituye una sinfonía de sabores difícil de igualar. Sus proporciones es un secreto bien guardado

Lo más típico es comerlos en el establecimiento que lleva su nombre, junto al monasterio de los Jerónimos que los elabora desde 1837 y es recomendable quedarse en él un rato, pues el interior del local merece la pena.
Con esta receta me he atrevido en casa y bueno, gustaron mucho.

Ingredientes

• Placas de hojaldre

Para el relleno:

• 225 gramos de azúcar
• 125 mL de agua
• 250 mL leche
• 4 yemas de huevo
• 1 palo canela
• Cáscara de limón
• 30 gramos de harina fina de maíz
• Canela en polvo
• Azúcar glas

Preparación

Preparar un almíbar con el azúcar y el agua. Dejar en ebullición 5 minutos con el fuego lento. Apartar.

En un cazo poner parte de la leche con el palo de canela y la cáscara de limón. Disolver la harina de maíz en la leche restante y añadir al preparado anterior. Al empezar a hervir espesará. Añadir con cuidado el almíbar. Mezclar evitando se formen grumos. Sacar la canela y el limón.

Cuando esta mezcla esté templada añadir las cuatro yemas colando de una en una.Ya tenemos la crema lista.

En moldes individuales, previamente engrasados ir depositado unos cuencos de masa de hojaldre. Pinchar la base con un palillo de dientes para que la masa no suba.

Agregar la crema en cada uno de ellos hasta las ¾ del recipiente.

Introducir en el horno a 170ºC durante media hora. Esta temperatura y este tiempo es variable en función del horno que tengamos.

Me llamo la atención en la carta de postres sobre todo de la Lisboa Antigua de uno que se llamaba Babas de Camello.Lo pedí pues la curiosidad podía con el nombre, pero la realidad no tenía nada que ver con el, una delicia de postre. Una copa fría a base de leche condensada al baño María y huevos cubierta con polvo de galleta.

Fuente:Imagen de CHL

Por último contaros los dulces del sur de Portugal. En la zona del Algarve domina el dulce a base de almendras, cabello de ángel, higos, mezclado con bizcocho o simplemente de almendras formando bellísimas figuritas de colores con motivos animales o frutales y de sabor muy parecido a nuestro mazapán.

Fuente:Imagen de CHL perteneciente a dulce de Almendra Lagos.Portugal

Fuente:Imagen de CHL.Dulces del mercado de Loulé.Portugal

Y para terminar de pasar tanto dulce qué mejor que acompañarlos con el licor tradicional de Lisboa, la Ginja, elaborado con guindas y aguardiente.

Fuente:Imagen de CHL

¡Qué Aproveche!