¡Busca tus recetas favoritas!

sábado, 29 de agosto de 2020

Jarel, los vinos de la bodega Almijara

Hola a todos queridos seguidores!!! Hoy una nueva experiencia de bodegas y vinos de Málaga. En el municipio de Cómpeta, en plena Axarquía malagueña, se encuentra situada la Bodega Almijara, a unos 636 metros de altitud sobre el nivel del mar,  en las faldas de las Sierras Almijara y Tejeda, que constituyen un impresionante macizo montañoso. Como reina de la cumbre está “la Maroma”, el pico más alto de la provincia de Málaga, con 2.068 metros de altura. Si tomamos la salida del pueblo (Cómpeta) dirección a Canillas de Albaida, tras 1 km de distancia y a mano izquierda, divisamos la bodega, cuyo origen tuvo lugar en siglo XIX, como fábrica de resina “La Resinera”, actividad, que se prolongó hasta los años de la Guerra civil española, época. en la que todo el pueblo se trasladaba al campo para trabajar la uva moscatel. En la década de los años 70, se convertiría en Bodega. En 1993 se consolida en el sector y en el año 2000 se adhiere a las Denominaciones de Origen Málaga y Sierras de Málaga.



Sobre pendientes pronunciadas se siembran sus cepas orientadas al sur sobre un suelo pobre de materia orgánica y de pizarra suelta que la hacen retener poco el agua que les llega. Cepas mimadas por el clima mediterráneo de veranos cálidos y secos e inviernos templados, con lluvias escasas. Condiciones idóneas para el cultivo de la Uva Moscatel de Alejandría, que además de ser una de las variedades más antiguas que se conocen, se ha convertido a lo largo de los años, en la señal de identidad de la bodega.


En la elaboración del vino dulce es fundamental el asoleo, utilizándose los “paseros”, típicos de la Axarquía y que poco han cambiado desde los tiempos antiguos en los que ya se realizaba dicha labor. Se trata de construcciones en tierra, orientados a la salida del sol y con una importante inclinación, con el fin de aprovechar al máximo las horas de sol de los meses de septiembre y octubre, fechas éstas en las que se realiza el proceso de asoleo.


Entre sus cepas se encuentra otra variedad muy antigua y autóctona de Málaga, además de la moscatel de Alejandría. La Romé, una uva con poca materia colorante, resistente al calor, de la que se saca un vino excelente con un sabor muy peculiar. Sus racimos son medianos y poco compactos, con pequeñas uvas redondas de color granate. Una de las peculiaridades de esta uva de piel gruesa es que en un mismo racimo se pueden encontrar uvas blancas, rosas y tintas. Antiguamente se usaban para dar color a los dulces, pero tienen cualidades suficientes para servir de base a otros tipos de vinos.

Los vinos de Almijara

Los vinos de la bodega en su presentación tienen dos características que los distingue: un barco en la etiqueta y su nombre "Jarel". El barco es el logotipo de la bodega, que viene a significar el poderío de la exportación antigua de los vinos malagueños, que se exportaban a países como Inglaterra, Países Bajos, América, etc. El medio de trasporte de aquel momento era el barco.





Jarel Naturalmente Dulce D.O.Málaga



Se obtiene tras un proceso de asoleo de la uva. La fermentación controlada del mosto, parandola mediante frío y así el azúcar residual del mismo y el alcohol se produce naturalmente sin añadir azúcar ni encabezamiento ( añadir alcohol vínico) alguno. 
Este vino no ha sido sometido a ningún tipo de crianza y el tiempo de forma lenta en botella le puede ir bien.
Es un vino de color amarillo brillante con reflejos dorados, nos encontramos con aromas varietales, cítricos, que junto a fruta blanca madura aparecen aspectos más complejos debido al asoleo y a su elaboración (almizcle, miel, pasas, etc...). En boca, se equilibran dulzura y acidez con un final bastante largo y especiado.
 Acompaña bien como aperitivo, con queso azul, “foie gras”, mazapán y canutillos de hojaldre rellenos de crema pastelera entre otros, igualmente se puede tomar como postre, ofreciendo mucho interés en la cocina moderna. Servir entre 10 y 12ºC.

Jarel Seco y Afrutado D.O. Sierras de Málaga
Se obtiene tras un proceso de fermentación a temperatura controlada de forma que se expriman los típicos aromas de esta variedad.
Es un vino de color pajizo pálido, en nariz nos encontramos aromas varietales (cítricos), uniéndose aspectos florales con una gran frescura característica de los vinos jóvenes. En boca, tras un ataque bastante vínico, ofrece una evolución recordando a los aromas de la nariz. Sorprende por su frescura, sus notas minerales y su gran potencial aromático. Es un vino joven, no sometido a ningún tipo de crianza para preservar al máximo su vivacidad y sus característicos aromas afrutados. Buen acompañamiento con pescados y mariscos. Servir entre 7 y 10ºC.

Jarel Rosado D.O. Sierras de Málaga



Es un vino que proviene de una uva tinta Romé autóctona de los suelos pizarrosos de la Axarquía malagueña. Destacan su mineralidad y frescura, naturaleza. En boca es aterciopelado, sabroso y seco. Un vino sutil y armonioso, con recuerdos salinos y ancestrales en el postgusto.
Tiene buena graduación alcohólica propia de las maduraciones en climas cálidos, y baja acidez. Notas vegetales, yodo y esquisto en nariz. Expresivo y franco en paladar.
Su color me recuerda a ese toque rojo-naranja de las salsas agri-dulces, limpio y brillante.
Marida muy bien con carnes y chacinas ahumadas.


Siempre me llamó la atención el nombre de Jarel, desconocía su significado; duda resuelta por el sumiller y formador de los vinos de Málaga por el consejo regulador de nuestra provincia, Jesús María Claros, que amablemente me lo explicó: Jarel se refiere a una de las duelas de la tapa de la barrica.
Estos términos, poco conocidos por mí, me han llevado a profundizar un poco en el tema y me ha encantado, por lo que os cuento parte de lo que he descubierto.


La barrica

La barrica, esto si sabia lo que era, es un recipiente de madera utilizado para la crianza de vino. La barrica oxigena el vino lentamente y le aporta textura y aroma para suavizar su sabor.

Esta se compone únicamente de dos materiales: duelas de madera y flejes de acero. Los fondos ó tapas de la barrica, si no están machihembrados, tienen sus tablas unidas mediante unas puntas dobles, con una lámina de anea en dicha unión que asegura la estanqueidad.
Imagen tomada de vinetur

La barricas existen desde hace más de dos mil años y eran el recipiente utilizado para trasportar el vino. Su origen se atribuye a los celtas, aunque fueron los romanos quienes popularizaron su uso al darse cuenta de sus ventajas en cuanto a manejo, resistencia, poca permeabilidad y dimensiones; ellos la implantaron en todas las zonas vinícolas del Mediterráneo, sustituyendo a las ánforas de arcilla hasta entonces utilizadas.

En un principio, las maderas más empleadas eran de pino, cerezo, haya, fresno, castaño, acacia y abeto, aunque con el tiempo se impusieron las de roble. El roble era un tipo de madera abundante en Europa, pues además de resistencia, le aportaba una serie de características gustativas y olfativas favorables al vino.

El roble con el paso de los años ha ido evolucionando también. El roble francés fue el primero en usarse  por los celtas y por los romanos. Y aunque ahora hayan otros materiales, otras maderas, el roble sigue siendo el más extendido.

El roble americano se usó posteriormente, tiene poros más abiertos y el precio es inferior. Su origen se remonta a los años 50 del siglo pasado donde bodegueros californianos empezaron a experimentar en vez de almacenarlos en fudres, que se usaba entonces, y descubrieron que los aromas mejoraban.

En el siglo XIX algunas bodegas españolas como Marqués de Murrieta y Marqués de Riscal introdujeron en España el uso exclusivo de barricas para envejecer sus vinos, siendo pioneras en el país.

Hoy en día muchas bodegas han dado la espalda a la madera en busca de nuevas o viejas alternativas para fermentar y envejecer sus vinos. Opciones como la arcilla o el cemento se están poniendo de moda y están dando lugar a nuevos métodos de crianza.

Mi más sincero agradecimiento a Jesús María Claros por su excelente asesoría.

Para finalizar, os invito a visitar la bodega y probar sus excelentes vinos:

Ctra. Canillas de Albaida S/N, 29754 Cómpeta, Málaga

CONTACTO María Socorro Ávila Lara

TELÉFONOS 952 55 32 85 o 657 30 77 y  6657307769
bodegasalmijara@gmail.com

                                                                        Estos vinos están distribuidos en Málaga por productos selección LOYPAR DE @GRUPO LOPEZ PARDO

C/ Zurbaran, 3 - 29700 Vélez-Málaga

Email: ventas@lopezpardo.com

Telf: 952 503 588

Fax: 952 504 086
                                                                                       ¡QuéAproveche!

No hay comentarios:

Publicar un comentario