¡Busca tus recetas favoritas!

lunes, 5 de agosto de 2019

De pinchos por Pamplona

Hola a todos queridos seguidores!!! Unos días en  Pamplona y como no, degustar sus riquísimos pinchos.

Un poco antes de las doce del medio día y pasadas las seis de la tarde, Pamplona se viste de color, fusión de sabores y paleta de sinfonías gustativas que hacen de tus papilas una auténtica fiesta. Concentrando su gastronomía en pequeños tesoros gastronómicos, Pamplona ofrece a sus visitantes mini cartas de su riqueza culinaria. Aunque son típicas las Calles de San Nicolás, Estafeta y los alrededores de la Plaza del Castillo, toda la ciudad, por muy pequeño que sea cada despacho gastronómico, este presenta su peculiar muestra de ricura, llamada pincho.



Bar en la Plaza Yamaguchi. Pamplona



Bar en la Plaza Yamaguchi. Pamplona


Bar Gaucho Pamplona


Bar Gaucho Pamplona

De carne, de pescado, verduras, combinaciones calientes o frías, salados o dulces, dan protagonismo a esta ciudad,en forma de pequeños bocados llenos de sabor.

Si estas líneas llegan a personas de más lejos de su conocimiento, diré que un pincho (pintxo en su grafía en euskera) es una pequeña rebanada de pan sobre la que se coloca una pequeña porción de comida. Recibe dicho nombre porque tradicionalmente se sujetaba la comida al pan con un palillo (aunque esta no sea una característica obligatoria).

El pincho está especialmente asociado a la gastronomía vasca, cántabra, navarra, caso que nos ocupa, de la de La Rioja, Asturias y Burgos, en la que se suele tomar como aperitivo acompañado normalmente de un vaso de vino tinto (llamado txikito) o un zurito, nombre por el que se conoce al pequeño vaso de cerveza de media caña; un mosto, generalmente blanco o un vermut.

Me llamo mucho la atención el término Juevincho que corresponde una oferta en la que muchos bares de Pamplona ponen la bebida (vino, zurito, …) y pintxo a 2 euros. En la mayoría de los casos, se puede coger cualquier pintxo de la barra y suele haber entre 10-15 opciones.

Aunque todos los que probé estaban de muerte quisiera hacer mención a los fritos y a la tortilla de patatas.

Con el término de "fritos" hacen unos rebozados, su mayoría rellenos de carne, piquillos, pescado o huevo de exquisito sabor. De ellos destacar unas bombas de huevo duro inmersas en una densa salsa bechamel y rebozadas en una crujiente cobertura. Buenisimos!!!!


Las tortillas de patatas, he probado varias, todas super buenas, cruditas con y sin cebolla, o las de Chaca, carne de marisco, que procede generalmente de las patas del cangrejo ruso, revuelto sutilmente con mayonesa y sumergido en el pincho de tortilla.
Mencionar el Bar Otero, excelente tortilla, primer premio en 2017.

Bar Otero.Pamplona



Y porque no nombrar dos miniaturas dulces, los garroticos de Beatriz y las pastas de "Layana".

Garroticos de Beatriz

Por los los años 60. Hace más de cuarenta años, Pabro Sarandi y su mujer, Beatriz, abrieron este local. Era una tienda de ultramarinos, pero con el tiempo acabó convirtiéndose en la tienda de pastas más deseada por los pamploneses, y también por los turistas. Uno de los encantos de este despacho de dulces, es la espera de unos treinta minutos que tienes que hacer a lo largo de la calle Estafeta para llegar a su mostrador.



En la actualidad, las encargadas son las hermanas Asunción y Lourdes Gómez Tellechea, quienes han aprendido del antiguo dueño a elaborar las productos, y, por supuesto, su especialidad, los garrotes. Las hermanas se despiertan a las cuatro de la mañana para encender el horno de la calle Estafeta, número 22. Vestidas de blanco, hacen alrededor de 2.400 garroticos al día en la trastienda de Beatriz. Además, también encontramos unas riquísimas pastas de té, magdalenas y bollos de leche entre otros.



Pastas de Layana

Pastas de  Layana


Fundada en 1871 Layana es una de las confiterías más afamadas de Pamplona. Sus pastas artesanales, rellenas de mermelada o de mantequilla, con almendra o bañadas en chocolate, hacen desde hace dos siglos las delicias de los más golosos.



Además de las pastas de té o café, venden chocolates, bombones y caramelos artesanos.

Se han convertido en todo un clásico de Pamplona, no solo por su receta tradicional y porque elaboran la pasta diariamente, sino también por su ubicación en pleno corazón de la ciudad, frente al Ayuntamiento.

Pido disculpas a los pamploneses, si he cometido algún fallo en esta entrada.

¡Qué Aproveche!

No hay comentarios:

Publicar un comentario